El café "Orient Express" fundado en 1890, en el edificio terminal de Sirkeci, viene prestando servicio desde entonces y conserva en su interior joyas fotográficas únicas
El 1 de junio de 1889 fue un día grande en Estambul. Llegó por vez primera el "Orient Express" procedente de París a la estación Sirkeci. El 19 de mayo fue un día triste en Estambul: llegó por última vez a la estación Sirkeci el "Orient Express". Pero la desdicha de la estación Sirkeci de Estambul no terminó ahí. En mayo de 2013 llegó a ella el último tren internacional. Y el 29 de octubre de 2013, con la inauguración del enlace ferroviario submarino Marmaray, la mítica estación que vio pasar por ella a personalidades importantes de toda Europa, pasó a ser únicamente un depósito de trenes de dudoso futuro, toda vez que ya no hay vías en servicio internacional que lleguen a ella y el trazado de parte de las vías ferroviarias que aún se conservan en superficie en Estambul, va a ser utilizado para la ampliación del Marmaray en la parte europea. Pero ayer, en el contexto de nuestros recorridos por Estambul y gran parte de Turquía, hemos querido acercarnos a Sirkeci para recordar lo que fue aquello en la ciudad y el asombro que debieron experimentar los viajeros nada más bajar del tren.
Viajar a Estambul es una de las ensoñaciones de cualquier europeo y también lo fue para quienes aprendimos en el bachillerato de antaño la "Canción del Pirata", escrita por el poeta romántico José de Espronceda en 1840. Imaginábamos un paisaje marino idílico en el que el velero bergantín del poema atravesaba el Bósforo para perderse en mil batallas vencedoras.
Puente colgante del Bósforo entre Europa y Asia en Estambul, cuando pasábamos bajo él en un barco turístico
Aquella misma imagen que llevó a Espronceda a escribir su poema es la que debieron experimentar años más tarde los viajeros del "Orient Express" al llegar a la ciudad. Y también es la misma que hemos experimentado estos días en esa enorme ciudad, de más de 14 millones de habitantes, a caballo entre dos continentes.
Diversas vistas del edificio histórico de la estación Sirkeci que hemos tomado estos días
La estación tiene actualmente sólo 3 vías que se emplean para dejar en ellas trenes del Marmaray mientras son limpiados. Algunos coches convencionales turcos están también en una de las vías de apartado.
Playa de vías y vías de apartado de Sirkeci con trenes del Marmaray y coches convencionales turcos
En el interior de la estación hay un pequeño museo con objetos que pertenecieron al "Orient Express" y recuerdos del tráfico ferroviario que hubo en ella en el pasado.
Placa del "Istambul Express" que unía esta ciudad con la alemana de Munich
Retrato de la escritora de novelas policíacas "Agatha Christie" que cuelga de una de las paredes del Museo. Es la autora de la novela "Asesinato en el Orient Express"
Locomotora de vapor construida en Múnich en 1874, que lleva el número 380, situada en el jardín exterior de Sirkeci. Probablemente remolcó trenes hacia Alemania
Calle llena de hoteles situada en la parte trasera de la estación. Muchos de esos hoteles albergaron en su día a los viajeros del "Orient Express" durante su estancia en Estambul
Cerámica que reproduce un grabado del siglo XVIII y que se encuentra en la estación subterránea de Sirkeci, pertenenciente al enlace Marmaray. Representa el Bósforo y el Cuerno de Oro. En la parte inferior de la confluencia de ambos cauces de agua aparece rodeado de jardines lo que hoy es el Museo Topkapi. La estación se encuentra al lado de ese Museo, en la parte que da al Cuerno de Oro. ¿Inspiraría este grabado a Espronceda para escribir su "Canción del Pirata?
Parte modernizada de la estación Sirkeci cuando se abrió el vestíbulo subterráneo del enlace Marmaray. Al fondo a la derecha se encuentra el acceso a esa estación. A la izquierda podemos ver uno de los trenes del Marmaray. A partir de aquí el túnel de ese enlace se sumerge bajo las aguas del Bósforo.
Bajo esas torres imponentes situadas en el lado asiático de Estambul, vemos el edificio de la estación ferroviaria de Haydarpasa. Cuando los viajeros del "Orient Express", llegaban a Sirkeci, opcionalmente eran llevados en ferry a esa estación donde podían continuar viaje en los Ferrocarriles otomanos e incluso llegar hasta Beirut a donde hubo un tren regular, La foto la hemos tomado desde el mirador del Museo Topkapi
Horario del tren Beirut-París en 1970, que completaba su trayecto en siete días. Pasaba por las dos estaciones de Estambul, pero la conexión entre ellas se hacía en ferry
Los viajeros de ese mítico tren podían también quedarse en Estambul y visitar los lugares de interés y monumentos de esa ciudad a los que dedicaremos otra entrada. (MAM)