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Zúrich-Belgrado en tren, un viaje como los de antaño (20h 53')

1 de septiembre de 2016

Este flamante coche de literas de los Ferrocarriles de Croacia me ha traído esta pasada noche desde Zúrich a Belgrado, en un viaje como los de antaño en tren: 20 horas y 53 minutos, con dos inversiones de marcha, seis cambios de locomotoras, tres acomplamientos o desacoplamientos de ramas y paso por el territorio de cinco administraciones ferroviarias: Suiza, Austria, Eslovenia, Croacia y Serbia. Y, por si no fuera poco, cambiar de coche dentro del mismo tren para completar el viaje. Todo un periplo ferroviario que dará envidia a más de uno, máxime si el material empleado en el viaje era de extraordinaria calidad.

Servicios ferroviarios internacionales en la antigua Yugoslavia en 2014 (I)

2 de marzo de 2014

Panorámica de la estación de Zagreb. El tren es el Alpine Pearls con un coche directo de Zurich, otros de Villach y la propia capital croata. 27 de junio de 2013 

Este artículo es una descripción básica de los servicios internacionales que tienen por origen y destino los países de la extinta Yugoslavia: Eslovenia, Croacia, Bosnia-Herzegovina, Serbia, Montenegro, Macedonia y Kosovo (territorio no reconocido por Serbia y por otros países), en un periodo iniciado especialmente en 2013, de severo recorte de servicios preexistentes y, en general, de una patente degradación de las prestaciones de la mayor parte de los trenes y sobre todo de la infraestructura, lo que redunda en servicios menos atractivos y competitivos. A pesar de ello aún es posible viajar por estos países en tren e incluso disfrutar de la experiencia inigualable de este modo de viajar, en un área llena de escenarios atractivos.


De Zagreb al Adriático (y II): Rijeka

23 de julio de 2013

Cuando el tren se va aproximando a Rijeka su gran zona portuaria se va abriendo ante los ojos del viajero ferroviario. Aquí hubo barcos desde antes de los romanos pero el ferrocarril le abría nuevas perspectivas. Croacia tiene otras importantes ciudades costeras con conexión ferroviaria: Split, Zadar y Pula. Esta última tiene su línea ferroviaria desconectada de la red croata porque la partición de la República de Yugoslavia trazó fronteras caprichosas en el territorio rompiendo el mallado de la red. Sin embargo, es Rijeka la que tiene una menor distancia con Zagreb y a través de ese corredor se mueve gran parte del tráfico de mercancías hacia el interior y hacia Hungría. De ahí que actualmente se esté trabajando en la mejora de la línea, después de haberse desechado por su enorme coste construir un nuevo trazado desde Zagreb hasta Rijeka. (Ver el capítulo anterior)

De Zagreb al Adriático (I): Karlovac


Cuando el viajero del tren Zagreb-Rijeka llega a la estación de Plase, a 618 metros de altitud, se encuentra de pronto con esta espectacular vista de toda la costa del Adriático en Rijeka, con esa ciudad al fondo y como horizonte la cadena montañosa litoral de la Península de Istria. El paisaje es espectacular como lo es también la obra de ingeniería ferroviaria que se acometió en 1873 para dar salida al mar por esa zona al Imperio Austro-húngaro. La vía férrea, especialmente desde Moravice, viene ajustada a la compleja orografía pero bajar hasta el mar desde Plase en tan corta distancia, es más propia de un vuelo en parapente que de un trayecto ferroviario. Desde el comienzo de mi viaje por los Balcanes tenía interés por comprobar qué llevo al Imperio Romano a establecer aquí un puerto comercial y tras haber pasado este lugar por las manos de ostrogodos, bizantinos, lombardos, ávaros, francos, croatas, húngaros y venecianos, finalmente decidir el Imperio Austro-húngaro enlazarla por ferrocarril con Viena y Budapest, a pesar de la enorme obra, para dar salida al mar a quienes durante 52 años rigieron los destinos de toda esta zona de Europa.

Zagreb, una estación marcada por la tragedia

21 de julio de 2013

Eran las 22h 40' del día 30 de agosto de 1974 cuando el expreso Atenas-Zagreb-Dortmund entraba a 103 km/h en la estación central de Zagreb, una velocidad muy superior a la permitida (40 km/h). Gran parte del tren voló literalmente sobre los desvíos y andenes de la estación muriendo 153 personas y quedando heridas otras 90. La mayor parte de ellas eran trabajadores en Alemania que volvían de pasar sus vacaciones en los diversos países de los Balcanes. Todos los médicos de la ciudad y el Ejército acudieron a la estación para atender a las víctimas, muchas de las cuales no pudieron ser identificadas. Posteriores investigaciones demostraron que el tren venía ya con exceso de velocidad desde la estación de Vinkovci, casi en la frontera de Croacia con Serbia. Además, el maquinista y su ayudante, que resultaron ilesos, no habían observado los preceptivos periodos de descanso y habían sobrepasado ampliamente los tiempos de conducción, sin apenas dormir, pues llevaban trabajando dos días completos. Un tribunal los condenó aunque reconoció el atenuante de la falta de descanso impuesto por la operadora. El recuerdo de esta tragedia, de la que se conserva la locomotora del tren en el Museo Ferroviario Nacional de Croacia, está aún en las mentes de los ferroviarios de su impresionante estación central, aunque la férrea censura de prensa de la época trató de ocultar los detalles del accidente.

De Belgrado a Zagreb: la "vía verde" electrificada internacional

19 de julio de 2013
En España, lo mismo que en otros países, muchos antiguos trayectos ferroviarios, cerrados al tráfico, han sido convertidos en "vías verdes" para uso recreativo de viandantes y ciclistas. Pero lejos estaba de conocer una vía verde electrificada a 25 kV y con circulación de trenes internacionales. Y no cualquier tren sino el que une Belgrado, en Serbia, con Eslovenia, Austria y Suiza. Toda una maravilla de paisaje bajo nuestro tren que se bamboleaba como si de una barca se tratase, al compás de las traviesas hundidas y la vía desnivelada. Tres días antes había hecho el trayecto entre Budapest y Belgrado pero al haberse hecho de noche en territorio serbio no podía saber la causa de nuestra marcha lenta y ondulante. Este nuevo trayecto diurno lo explica todo. Así están las vías ferroviarias en Serbia, comidas por la vegetación y el abandono.