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En tren por Estados Unidos: Michael Portillo nos enseña los trenes norteamericanos con la Guía Appleton

20 de julio de 2017

El prolífico político y periodista Michael Portillo se asoma de nuevo a las pantallas de TV para ilustrarnos sobre el ferrocarril de los Estados Unidos de la mano de la histórica guía Appleton. Como en anteriores series de TV de este periodista, que hemos narrado en el Blog, Portillo encandila al espectador con estos nuevos viajes grabados al otro lado del Atlántico, cuyo título en castellano es "En tren por el Nuevo Continente: Estados Unidos" y que se emite en el Canal Viajar de televisión por cable. Al igual que la serie "En tren por el Viejo Continente" en la que Portillo se apoya en la célebre Guía Bradshaw, en esta ocasión ha escogido la guía Appleton en la edición publicada en Estados Unidos en 1879, cuando la red norteamericana no tenía el desarrollo actual. Veamos el contenido de los capítulos.


La publicidad ferroviaria a la búsqueda de viajeros (I)

12 de febrero de 2014

Los viajeros ferroviarios de Larga Distancia de hoy día no suelen tomar los trenes por la publicidad que se hace de ellos sino más bien por las ofertas que presentan en comparación con otros medios de transporte. El precio del billete y el tiempo de trayecto se han convertido en el principal reclamo para el ferrocarril. Pero eso no siempre fue así. En una primera etapa de las concesiones ferroviarias, las operadoras pugnaron por presentar a los viajeros las mejores guías en las que se detallaban con precisión las rutas, lo que se veía a izquierda y derecha de la marcha, las opciones de alojamiento y comida en las poblaciones del trayecto, los bellezas naturales que podían contemplarse e incluso los balnearios a los que se llegaba por ferrocarril, algo muy frecuente en las guías ferroviarias europeas, en la época dorada del termalismo. Ya nos referimos a ello en esta entrada antigua del blog. Pero hacia finales del siglo XIX, en especial en los Estados Unidos y Canadá, comenzaron a aparecer anuncios en las publicaciones, sobre trayectos ferroviarios que podían atraer a los viajeros, como el que abre estas líneas, sobre el acceso a las Cataratas del Niágara en ferrocarril, a través del puente colgante, primero que se construyó con esta tecnología en una línea ferroviaria. La imagen data de 1876, aunque el puente se abrió al ferrocarril en 1855.

Estados Unidos en tren, de costa a costa (y III): Regreso por Chicago y las cataratas del Niágara

17 de septiembre de 2013
El Mount Vernon es uno de los espectáculos visuales más bellos que pueden contemplarse desde el Amtrak Cascades. Este tren, diseñado y fabricado por Talgo, circula en Estados Unidos, desde el 1 de mayo de 1971, entre Eugene (Oregon) y Vancouver (Columbia Británica). Nuestro viaje hacia el Oeste había tocado a su fin y viajar en este tren fue un bonito preámbulo de la vuelta hacia Nueva York, final de nuestro viaje ferroviario.

Estados Unidos en tren, de costa a costa (II): Hacia la costa Oeste





Caos de tráfico en una calle neoyorkina, precisamente donde se encuentra la estación Van Wagner del Metro

Para empezar el viaje, no estaba nada mal hacerlo por aquel que fue uno de los muchos puertos, si no el principal, de entrada migratoria desde Europa. Vi en Nueva York y su bulliciosa urbe, un sitio único. Presidida por la Libertad como baluarte, por sus imponentes rascacielos, y por su escandalosa agitación… que lleva a comprobar la razón del célebre ensayista Javier Gomá cuando habla del ser humano como único y repetible (en vez de único e irrepetible). En tan populosa ciudad, seres humanos había por doquier únicos, pero en definitiva repetibles y reemplazados siempre por más visitantes, más jóvenes que llegaban a probar fortuna, más buscadores de oro en el mercado bursátil, más comerciantes, más defensores de derechos, más predicadores…  Únicos y repetibles. Estuve sólo unos días, en albergues “low cost” pues es lo que permite la economía de un estudiante, y ahorro citar las “delicatessen” que degusté.


Estados Unidos en tren, de costa a costa (I): Consideraciones generales

En el mes de agosto de 2010, cuando regresaba de un viaje ferroviario por el norte de Noruega y Suecia, me tropecé casualmente en el mismo tren en el que viajaba, en la frontera entre ambos países, más arriba del Círculo Polar Ártico, con un joven estudiante español, apasionado por el ferrocarril. Al igual que yo, también volvía en el mismo tren desde Narvik (Noruega) hasta Estocolmo pero iba realizando el Interrail. Intercambiamos algunas palabras en esa conversación y me contó que el año anterior había realizado un viaje en ferrocarril de costa a costa por Estados Unidos. El mapa situado sobre estas líneas (seleccionar para verlo completo) recoge en síntesis el recorrido de ida (líneas negras) y el de vuelta (líneas verdes). El relato que sigue es el de su viaje, redactado por él mismo, así como las fotografías. Parte de los escenarios descritos no me eran desconocidos porque también había hecho ese trayecto de costa a costa aunque en avión. Un detalle preciso de las líneas ferroviarias norteamericanas, gestionadas por la operadora estatal Amtrak, se puede consultar en este enlace. Estados Unidos no es precisamente el país de los viajeros ferroviarios de Larga Distancia. Por eso tiene más interés el pormenorizado relato que insertamos a continuación.

Las Termas de Caracalla y el ferrocarril norteamericano

10 de septiembre de 2012

Cuando le comenté a un asiduo lector de este Blog que dedicaría una entrada a comentar de qué forma las Termas de Caracalla habían influido en el ferrocarril de los Estados Unidos me mostró su perplejidad. Y realmente parece algo así como confundir el tocino con la velocidad, pero nada más lejos, como vamos a ver.