Grecia: viaje a las ruinas del ferrocarril helénico

16 de agosto de 2016

Grecia es un país lleno de ruinas y vestigios de su rico pasado histórico. Desde la antigüedad paleolítica hasta el periodo otomano, todos sus habitantes han dejado la huella en el paisaje griego. Muchos de esos vestigios podemos admirarlos en sus ciudades y campos, pero también en los grandes museos occidentales, enriquecidos con todo lo que ingleses, franceses y otros ocupantes consiguieron sacar de una y otra forma en la época en la que estuvieron en su suelo. Ya en nuestros días, parece que su ferrocarril ha engrosado también la lista de las ruinas hasta tal punto de que ha acabado siendo vendido por tan sólo 45 millones de euros a los italianos, lo que de él queda tras el cierre de casi 900 km de red, unas deudas acumuladas de casi 800 millones de euros por ayudas irregulares y multitud de huelgas políticas de sus sindicatos ferroviarios que han sumido en el descrédito la fiabilidad de sus trenes como medio de transporte.

Veníamos siguiendo la situación de la operadora ferroviaria griega (Trainose) desde hace años con la preocupación de su incierto futuro, desde que el anterior gobierno de Antonis Samaras acariciaba su privatización en 2013 por un precio de 300 millones de euros como una forma de conseguir fondos para que pudiera modernizarse. Entonces el actual ministro de Economía, Giorgos Stathakis, en la oposición aquel año con su partido Syriza, clamó contra cualquier intento de venta a ese precio acusando a Samaras de dilapidar las propiedades estatales.

Ya en diversos años hasta 2014, Trainose efectuó un cierre de líneas debido a las dificultades financieras de la empresa.

Así dejaron de circular trenes entre:

- Atenas-Alexandroupolis (excepto en el tramo entre Tesalónica y Alexandroupolis).
- Edesa-Florina
- Patras-Pyrgos-Kalamata
- Kalamata-Mesenia
- Corinto-Napflio-Trípoli

Este cierre afectó incluso a las relaciones ferroviarias internacionales de Grecia con otros países y dejaron de circular los trenes entre:

- Tesalónica-Skopje-Belgrado
- Tesalónica-Sofia-Bucarest
- Tesalónica-Estambul
- Atenas-Sofia

El 9 de mayo de 2014 se restablecieron los servicios desde Tesalónica con Belgrado y Sofia, como ya dejamos constancia en el Blog.


 La red ferroviaria griega antes de los cierres de líneas


La red ferroviaria griega en la actualidad

Tres pequeños ferrocarriles históricos se han salvado del cierre: Pyrgos-Olympia, Diakofto-Kalavrita (Tren Odontotos) y Volos-Milies (Tren de Pelion).

Al mismo tiempo, las obras de mejora de la infraestructura emprendidas en Grecia han dejado sin conexión directa el trayecto entre Atenas y Patras, en el que el autobús ha sustituido al tren en un tramo del Peloponeso.

Con todos estos antecedentes y ante la amenaza de la Comisión Europea de reclamar los casi 800 millones de ayudas irregulares a sus ferrocarriles, el Gobierno griego no ha tenido más remedio que ponerlos a la venta, pese a las huelgas -incluso de semanas- de los sindicatos ferroviarios. Pero el precio anterior de 300 millones se rebajó hasta 45. Tres compradores llegaron a presentar expresión previa de interés: los Ferrocarriles rusos, RZD; los italianos, Ferrovie dello Stato, y una empresa naviera china, COSCO.

En pleno proceso de venta, la crisis de los refugiados motivó el corte en Idomene de la frontera entre Grecia y Macedonia, impidiendo el paso de los trenes. Este cierre ocasionó cuantiosas pérdidas al transporte de mercancías, lo que ha motivado la retirada de COSCO en el proceso de privatización. Los rusos tampoco entregaron la oferta final y la venta se ha cerrado a los italianos. Curiosamente, los ferroviarios que durante meses se opusieron a la venta han recibido un bonus del comprador por importe de 1.000 euros por cada trabajador.


Este es el panorama ferroviario que nos vamos a encontrar en Grecia hacia donde partimos en tren tras recorrer diversos países de Centroeuropa.


El tren turístico Pelion entre Volos y Milies que sólo circula en temporada veraniega

La red ferroviaria griega tiene actualmente algo más de 1.500 km de líneas en ancho estándar, de los que están electrificados sólo una parte muy pequeña. 42 km de vías de ancho inferior al métrico subsisten en los pequeños ramales turísticos.

Su historia ferroviaria, sin embargo, es dilatada. En 1835 se comenzaron los proyectos para la construcción de su primera línea ferroviaria: Atenas-Puerto de El Pireo, aunque no se puso en servicio hasta 1869.

En 1909 ya se habían construido y puesto en servicio 1.606 km de líneas. La Segunda Guerra Mundial ocasionó cuantiosos daños en la infraestructura que tardaron varios años en ser reparados.

La crisis actual se ha llevado por delante a la propia compañía ferroviaria estatal, Trainose, que ha cambiado de manos. Lo que vayan a hacer los italianos en el futuro con los trenes griegos aún no se ha concretado aunque las informaciones indican que se prepara una importante inversión en material.

La infraestructura de red continúa en manos del gobierno griego que lleva acometiendo mejoras desde hace algunos años, con ayuda de la Unión Europea.


El tren turístico Odontotos entre Diakofto y Kalavrita

Todo eso tendremos ocasión de verlo en las próximas semanas, incluso recorriendo trazados donde ya no circulan los trenes, para lo que habrá que tomar autobuses.

Y tras los recorridos iremos desglosando en el Blog nuestra impresión con abundante material gráfico que espero sea del agrado de los lectores. (MAM)