8 de septiembre de 2016

Atenas: Muchas infraestructuras, muy pocos trenes


Ningún viajero que llegue a la actual estación de Atenas, con sólo 3 vías, podría pensar que el proyecto para hacer de ella este espectacular complejo llegue a ser realidad algún día. Las obras, con una versión reducida de lo que ahí vemos, están paradas en un avanzado estado de construcción, sin que sea posible adivinar si algún día estarán concluidas. Hemos viajado en el Metro de Atenas, cómodo, limpio y rápido, en sus ferrocarriles suburbanos, que forman una cruz con intersección en el intercambiador de SKA, y viajado hasta Corinto siguiendo el trazado del antiguo tramo de los Ferrocarriles de Vía Estrecha del Peloponeso que iban desde el Puerto de El Pireo hasta Corinto, sustituido hoy por un espectacular ferrocarril preparado para la alta velocidad. De todo ello hablamos a continuación.

El Metro de Atenas


3 líneas tiene el Metro de Atenas con unos 55 km y 52 estaciones. A pesar de su pequeño número de líneas, de su extensión dice bien el que llega hasta el Aeropuerto y el Puerto del Pireo, en su zona de ferries, y a la estación de ferrocarril de Larissa. La línea 1, la más antigua, data de 1869 y fue construida como ferrocarril Pireo-Atenas, con trenes de vapor y en superficie. Ya entrado el siglo XX, el ramal fue electrificado e incluido en el Metro de la ciudad.


Estación de Metro de El Pireo, terminal de la L1 del Metro de Atenas


Vestíbulo de la estación Sintagma, situada bajo la plaza del mismo nombre, donde se cruzan las líneas 2 y 3


Estación del Metro de Acrópolis, por la que se llega al Partenón


Que Atenas es una ciudad de ruinas lo sabe todo el mundo, y muchas veces esos vestigios arqueológicos han ido a parar a muchos museos occidentales, ajenos al país helénico. El Metro de Atenas, en su red de galerías, especialmente en la estación de Acrópolis, recoge un muestrario interesante del pasado de la ciudad.


Decíamos que la L1 del Metro de Atenas fue construida en superficie. Así sigue hoy día, aunque sus estaciones han sido modernizadas. En la foto, la estación de Moschato.

Hay que decir que el Metro es el medio de comunicación ferroviaria que mejor funciona en Atenas. El acceso a las estaciones carece de torniquetes, sólo hay canceladoras. Los viajeros cuidan mucho de sus instalaciones aunque algunos de los trenes de la L1 están grafiteados ya que circulan en superficie durante un largo tramo de la línea.

El Metro brinda rápida y buena comunicación con los lugares de mayor interés comercial, administrativo y turístico.




Terminal de ferries y de cruceros de El Pireo (Atenas) situada al lado de la estación de Metro del mismo nombre



Parlamento de Grecia y Tumba al Soldado Desconocido, en la Plaza Sintagma, a donde llegan dos líneas de Metro, con los famosos soldados Évzones montando guardia



El Partenón, en la cima de la colina de la Acrópolis, a cuya base se llega muy fácilmente en el Metro

Prostiakos, la red de Cercanías de Atenas

Atenas tiene una red de Cercanías en forma de cruz, dos de cuyos tramos son herederos de la red de vía estrecha del Peloponeo. Esta red fue cerrada completamente en 2011 y en su lugar y sólo entre Atenas y Kiato se ha construido una doble vía electrificada con características de alta velocidad, que sustituye a la anterior de vía estrecha.



Esquema de la red de Cercanías de Atenas. La línea vertical va desde el puerto de El Pireo, a donde antiguamente llegaba la línea de vía estrecha del Peloponeso, hasta Chalkida en la parte norte. La horizontal va desde el aeropuerto hasta Kiato. El problema es que la catenaria llega sólo hasta 200 metros de la estación de Atenas y sólo cuando se pongan en servicio los nuevos andenes podrán entrar y salir de ella trenes con tracción eléctrica. Mientras tanto, no hay forma de completar ningún trayecto largo sin cambiar de tren de uno diésel a otro eléctrico o viceversa. Las conexiones entre la línea vertical y la horizontal también requieren de cambio de tren. De esta forma, un recorrido desde la estación de Atenas a Kiato, por ejemplo, exige 3 trenes distintos.

En la línea vertical, que la usan también los Intercity de Tesalónica, hay sólo una circulación cada 2 horas por sentido. En la línea horizontal, cada hora. ¿Cuál es el origen de ese problema?



Durante los últimos años, se han estado construyendo en el entorno de Atenas infraestructuras ferroviarias sobredimensionadas para el escaso tráfico que hay y la más necesaria para vertebrarlo todo es la nueva estación central de Atenas, que aquí vemos con obras paradas y la electrificación sólo con los postes. Sólo poner en servicio tan necesaria instalación ahorraría centenares de horas diarias a los viajeros, perdidas en los cambios de trenes.

La estación actual tiene sólo 3 vías y un pequeño vestíbulo a todas luces insuficiente, como se ve en la siguiente foto. A la izquierda se divisa el primero de los andenes de la nueva e inacabada estación.



Viajar por el eje horizontal hasta Corinto o por el vertical hasta Chalkida, partiendo de la estación de El Pireo, permite apreciar la enormidad de las infraestructuras ferroviarias construidas que apenas tienen uso. Vamos a hacer un rápido recorrido por ellas.





Estación de El Pireo, con 5 vías, de las que parte sólo un tren cada hora. Al no haberse concluido la electrificación, el material es diésel



Estación de Ano Liosia. Para que el viajero pueda seguir a Corinto y Kiato debe cambiar aquí del tren que salió anteriormente de Atenas para tomar otro eléctrico. Un tren cada hora

La mayor parte de las estaciones que hay en el tramo horizontal hacia Kiato tienen 4 vías y algunas de ellas dos generales sin andén. La mayor parte de esas vías no se usan. La electrificación es para 200-250 km/h.



Un tren eléctrico "Desiro" de Siemens entrando en la estación de Corinto, localidad que cuenta con algo más de 50.000 habitantes. La estación tiene 8 vías de alta velocidad. El trazado, que debería prolongarse hasta Patras, para sustituir al antiguo de vía estrecha, tiene sus obras paradas a partir de Rodofani. Por esta estación pasa un tren cada hora en cada sentido.

En el trayecto hasta aquí, el viajero ha podido ver la enorme estación de distribución de Acharnes, con una inmensidad de vías en las que funcionan hasta las señales pero donde no se mueve ningún tren.

Igualmente, la estación de clasificación de mercancías de Thriasio Pedio, en la que sólo había un tren cuando pasamos. La vista aérea de esa estación impresiona por su enormidad y por su vaciedad.




Estación de clasificación de mercancías de Thriasio Pedio en la entrada del Peloponeso. Había técnicos de electrificación trabajando en ella. Su uso futuro está condicionado a que haya red ferroviaria en el Peloponeso y que ésta genere mercancías, algo para lo que pasarán décadas.

Por lo que respecta al eje vertical, en otro viaje hasta Chalkida, como nuestro tren discurría por la línea de Tesalónica, nos cruzamos con un par de Intercity. La frecuencia de Cercanías en ella es de uno cada dos horas, con el agravante de tener que cambiar de tren en Afidnai, tal como se ve en la foto.



Chalkida es un centro turístico muy bello, donde mar y tierra confluyen, y que cuenta con ferrocarril desde 1904, como ramal de la línea de Atenas-Tesalónica.




Estación histórica de Chalkida aún hoy en uso



Un puente levadizo une el barrio de la estación de Chalkida con la población propiamente dicha, situada en la enorme isla de Evia.

Volvemos de nuevo a Corinto porque no debemos olvidarnos de dos cosas importantes. Su papel en la desparecida red de vía estrecha del Peloponeso y la construcción del canal que lleva el nombre de la ciudad.



Este es el edificio de la estación de vía estrecha de Corinto, actualmente Delegación de Urbanismo del ayuntamiento de la ciudad. Hasta aquí llegaba la línea procedente de El Pireo y de ella partían los dos brazos de la red de vía estrecha del Peloponeso: la oriental y la occidental, que confluyeron en el sur de la Península, en la localidad de Kalamata, hasta donde llegaremos en unos días.




Poste de señales mecánicas de la red del Peloponeso que se ha conservado a la entrada de Corinto



Antigua postal en la que vemos la estación de Corinto de la red de vía estrecha del Peloponeso. Esa estación se ha conservado tal cual, como hemos indicado

Ya desde los tiempos de griegos y romanos se pensó y proyectó un canal que uniese los mares Egeo y Jónico en la parte más estrecha que es la entrada a la Península del Peloponeso. Pero no fue hasta el 9 de noviembre de 1893, con el proyecto de Ferdinand de Lesseps, cuando se inauguró el Canal de Corinto. Sobre este Canal pasó la línea de vía estrecha de la red del Peloponeso por el puente que vemos en la foto.




Canal de Corinto con el puente metálico del ferrocarril de vía estrecha. La doble línea actual en ancho UIC y la autovía pasan por el lugar desde donde está hecha la foto (Foto Alterego)


Bahía de Corinto. El Canal del mismo nombre comienza al fondo junto a la edificaciones que allí se ven

La estación de cabecera de esa red de vía estrecha estaba en el Puerto de El Pireo, en un edificio hoy abandonado.





Estación abandonada en el Puerto del Pireo que era la cabecera de los ferrocarriles de vía estrecha del Peloponeso. La línea que llegaba hasta aquí fue convertida a ancho UIC hasta que se construyó la nueva estación cuya foto hemos visto antes. Como pasó con la vieja estación de Corinto, cuando se cerró la línea, el material móvil quedó allí abandonado

Hemos hecho un recorrido rápido aunque completo por la red de Cercanías de Atenas y por su Metro. Mañana comenzaremos nuestro viaje por el Peloponso que nos llevará a recorrer localidades que antaño tuvieron ferrocarril y donde hoy sólo quedan un par de trenes turísticos. Todo ello lo comentaremos en los próximos días. (MAM)